Cabras y alcalde de Rosinos

SANABRIA-LA CARBALLEDA: Cabras y alcalde de Rosinos (OPINION)
Publicado en La Opinión de zamora
por Jose Ignacio Regueras

Ante la alusión a "gente de Benavente" que se opone a la suelta de cabras monteses en su término municipal, publicada en un artículo en este periódico el pasado domingo 29 de enero de 2005, tengo que manifestar lo siguiente:

1) En un trabajo realizado por el abajo firmante en 1983 para el antiguo ICONA y para la Diputación Provincial se cita la existencia de rebeco en Sanabria (página 128) hasta principios de los años 40 del siglo XX. No se tienen noticias de la existencia de la cabra montés en la comarca.

2) En un artículo publicado por el que suscribe en agosto-septiembre de 1985 en el Boletín Informativo nº 24 de la Diputación de Zamora, titulado "Gran fauna extinguida en la provincia de Zamora", se indica la desaparición de la raza lusitánica de cabra montés del sur de Galicia y del norte de Portugal a finales del siglo XIX y la probabilidad de que algún representante de la subespecie habitase en ese siglo las montañas sanabresas.

3) En una publicación del Centro de Estudios "Ledo del Pozo", en su revista Brigecio nº 8 de 1998, el abajo firmante publicó un artículo titulado "Posible reintroducción de rebeco o cabra montés en la alta Sanabria". En el trabajo se analizan las noticias históricas, los testimonios verbales sobre la reciente existencia del rebeco, los pros y los contras de una u otra intervención con mayor densidad de argumentos para el rebeco, y se concluye que se restauraría el medio natural al devolver a la montaña lo que el hombre le arrebató.

4) En los últimos años -sin que antes hubiera manifestado ningún interés- el promotor cinegético Saturnino Ares se interesa por el tema. Este interés coincide con el cierre de algunos caminos tradicionales de uso público en la Sierra de la Cabrera. Dichos cierres en muchos casos han sido violentados y anulados por "Fuenteovejuna".

5) Ante esta situación, el que suscribe quiere dejar claro que él podría estar de acuerdo en la reintroducción e incluso colaborar con ella, pero si dicha actuación supone un recorte en las libertades públicas, en el uso y disfrute del monte por los vecinos de los pueblos afectados, por los que tenemos interés allí, por los posibles visitantes, etc. y de hecho va camino de convertir la Sierra de la Cabrera en una finca privada de los poderosos personajes que están detrás, la determinación del abajo firmante sólo puede ir en contra de tal actuación. Señor alcalde: No quiero ni rebecos, ni cabras, si la Sierra se va a convertir en un cortijo de uso privado y estaré siempre del lado de los vecinos de los pueblos. Intervenciones de este tipo pisotean la seguridad jurídica y sólo animan a no invertir, espantando a todo tipo de personas interesadas en la comarca.

6) Intentar vendernos la imagen del señor Ares como un mecenas, altruista y salvador de la comarca, produce risa conociendo al individuo. No me cuadra la imagen del personaje altruista que se dedica a cerrar caminos públicos. Los salvadores ya no los quieren ni en las repúblicas bananeras.Es evidente que en el futuro si la cabra montés se aclimata, los cotos de caza tendrán mayor valor, pero conviene recordar que en Riaño y en Ancares hay corzo, ciervo, rebeco y cabra montés y los índices socioeconómicos y la población humana de dichas comarcas no aumentan. La caza mayor es un buen recurso, pero no es una panacea.

7) Habla del final de la concesión de los cotos, en relación a que el personaje citado quizás no pueda aprovechar las cabras que ha soltado. Es evidente que nadie entiende que un particular ponga en libertad unos ejemplares de una especie que muy probablemente no pueda llegar a cazar por su amplio periodo de aclimatación, unido a la caducidad de la adjudicación cinegética. ¿Alguien con la suficiente influencia política o de otro tipo, le ha garantizado al señor Ares la continuidad en sus explotaciones cinegéticas? ¿Nos podría explicar usted señor alcalde públicamente, cómo está el tema de la caza en Escuredo?, el contencioso/s, la ejecución de la sentencia, "los que no van a cazar nunca en ese coto" etc. A buen entendedor pocas palabras.

8) Recientemente me animó a que planteara un contencioso contra su Ayuntamiento por el tema de los cierres de los caminos. Comprenderá que con el tiempo que tarda en resolverse el proceso, la ejecución de la sentencia y el tiempo que me queda a mí de adjudicación cinegética, pues no merece la pena. Por otro lado, con las informaciones que me llegan sobre el caso de Escuredo, merece todavía menos la pena.

9) Un refrán que dice: "La avaricia rompe el saco". Cierto número de cotos se están convirtiendo en vedados y no puede cazar legalmente nadie. Diversos problemas entre propietarios, adjudicatarios, vecinos, etc. llevan a la anulación del coto. Conviene ser consciente que la máxima de "mío o de nadie" supone en la práctica que el adjudicatario se queda sin cazar en ese coto, pero el propietario del terreno (normalmente el Ayuntamiento) no ve un solo euro por la caza de dicho territorio mientras se resuelven los problemas, que suelen tardar años. En estas situaciones perdemos todos, menos los abogados. Decisiones arriesgadas y en contra de la población -del término municipal o de los términos vecinos- pueden favorecer este tipo de situaciones. Sería paradójico tener una sierra con mucha caza, pero que, legalmente nadie puede disfrutarla, ni venderla. El cierre de caminos es un atentado a los derechos de los vecinos y de los posibles visitantes, que cada vez serán menos. ¿Por qué no corta también la carretera en su pueblo y le da llave sólo a sus amigos? Como dicen por Cional, quizás el futuro sea el de Escuredo, en su magnífico Ayuntamiento; los problemas entonces prácticamente desaparecerían.

Jose Ignacio Regueras es biólogo y titular cinegético de un coto en la zona