Estudiantes de la Universidad de Valladolid investigan la idiosincrasia de la zona fronteriza

SANABRIA-LA CARBALLEDA:

Estudiantes de la Universidad de Valladolid investigan la idiosincrasia de la zona fronteriza
El contrabando y el patrimonio histórico, entre los temas de análisis
E. R. Puebla.-
Cinco estudiantes de la Universidad de Valladolid llevan varios meses visitando la comarca, de cara al proyecto final del Máster en Patrimonio Cultural, el cual tienen previsto termina en unos meses. Raúl Gonzáles y Víctor Recio son de Valladolid.
Alicia Torío y Cristina Tostón, residen en Palencia, si bien esta última tiene orígenes zamoranos. Mª Elena Vaca Ortega es otra componente del grupo, natural de Segovia.

La investigación se centra en los municipios fronterizos de la comarca: Hermisende, Requejo, Pedralba de la Pradería, Puebla de Sanabria y Manzanal de Arriba. Aunque el eje vertebrador del trabajo son las relaciones fronterizas y el contrabando, estos universitarios están estudiando también otros aspectos interesantes como la riqueza patrimonial y las características socio-económicas y culturales.
Cristina Tostón explica que ella y sus compañeros están haciendo «un trabajo de campo visitando todos los municipios, con el fin de estudiar los recursos que ofrecen, como la arquitectura tradicional o el medio natural.
Llevamos mapas topográficos de diversas escalas, recogemos testimonios, hablamos con la gente, con ayuntamientos y asociaciones, de cara a conocer las costumbres y tradiciones, los modos de vida y las actuaciones que se están llevando a cabo en las diferentes localidades».
El trabajo necesita también de importante documentación bibliográfica, tanto nacional como provincial y portuguesa, libros y artículos, así como documentación de archivo; todo ello ya en poder de estos estudiantes.
Aunque según comentan, no tienen cerrado el número de capítulos, es seguro que se tratarán temas relativos al medio natural y humano, patrimonio histórico y artístico, patrimonio etnológico, el contrabando, conclusiones, actuaciones propuestas y plan de dinamización. En los meses que llevan trabajando ya tienen opiniones interesantes, como explica Cristina Tostón: «Hemos visto las peculiaridades que ofrece esta zona por su situación de frontera, así como las influencias mutuas del castellano y el portugués que dan al habla unas características determinadas.

En cuanto al contrabando, algo común también en otras zonas de frontera, se puede destacar que la situación socio-económica de subsistencia durante siglos, agudizó el ingenio de los vecinos para conseguir introducir determinados productos en la zona. También nos ha llamado la atención la pervivencia del modo de vida tradicional casi hasta la actualidad. Se trata de una zona aislada históricamente, donde muchos aspectos importantes pueden desaparecer».

Entre los objetivos de este Máster destacan también las soluciones a aportar, y a falta de algunos meses para su conclusión, ya tienen claros algunos detalles, como la puesta en valor del patrimonio etnográfico y el recuperar, para que no se pierdan, todas las historias o leyendas de la zona. «Algunos vecinos han contado, con cierta añoranza, que antes de suprimir las fronteras existía una mayor relación entre los dos países que ahora, sobre todo en fiestas y romerías», explicaba Cristina Tostón.
Otro dato interesante revelado por estos estudiantes se refiere a la existencia de gentes en estos pueblos que están preocupadas por revitalizar la comarca: «El desarrollo de estos pueblos fronterizos pasaría inevitablemente por explotar el gran potencial de su belleza paisajística, la riqueza cultural y etnográfica y una mayor implicación de los habitantes de los pueblos, que deben ser conscientes de lo que tiene», concluye Cristina Tostón.